“Nuestro aporte está en el trabajo que hacemos año a año explicando que el trabajo infantil lo que hace es perpetuar la pobreza”, comento Alejandro Pannunzio, presidente de APAMA

El Día Mundial Contra el Trabajo Infantil, que se celebra este lunes en todo el mundo, fue instaurado por la Organización Internacional del Trabajo con el fin de alertar a la población acerca de este flagelo que afecta a millones de niños en todo el planeta. Según datos del Fondo para la Infancia de Naciones Unidas de UNICEF, hay más de 150 millones de niños que trabajan en todo el mundo. Según el Barómetro de la Deuda Social que elabora la Universidad Católica Argentina, hay más de un millón de niños, niñas y adolescentes de entre 5 y 17 años que trabajan.

En Argentina, que un niño o niña trabaje, constituye un delito. El trabajo está prohibido para niños por debajo de los 16 años, de acuerdo a la Ley N° 26.390 de Prohibición del Trabajo Infantil y Protección del Trabajo Adolescente.

La erradicación del trabajo infantil es una de las metas a alcanzar entre los Objetivos de Desarrollo Sostenible a 2030, que convoca a empresas, organizaciones sociales, gobiernos, y a la sociedad en general a comprometerse.

“Los niños deben estar en la escuela, sin la escuela no saldrán de la pobreza, ni tendrán un futuro y nuestro país tampoco tendrá destino digno” agregó

En cuanto a la responsabilidad empresarial, desde hace un tiempo la asociación que nuclea a los arandaneros integra la Comisión Provincial para la Erradicación del Trabajo Infantil COPRETI, junto al gobierno entrerriano y otras entidades. A nivel nacional, a través del Comité Argentino de Arándanos, APAMA es también miembro de la Red de Empresas contra el Trabajo Infantil, dependiente de la CONAETI, la comisión nacional par de la provincial. –