El titular de la Asociación de Productores de Arándanos de la Mesopotamia Argentina (APAMA) Alejandro Pannunzio, aseguró, tras la séptima reunión del Consejo Municipal de la Producción, que “el organismo viene funcionando muy bien, tal cual lo esperado, y creemos importante respaldar esta iniciativa porque tenemos muchas expectativas de que en ese ámbito podremos finalmente avanzar sobre cuestiones postergadas que tienen que ver con la producción de arándanos en particular”.

Sobre esos puntos en particular, indicó que desde el Consejo se trabajan temáticas vinculadas a todas las áreas productivas de la ciudad y dijo que en cuanto al árandano, “se está avanzando en medidas concretas para poder lograr mayores niveles de empleabilidad de mano de obra local en la próxima cosecha”, aunque advirtió que aún no es más específico porque “es prudente esperar a que tengamos definiciones, sobre todo vinculadas a gestiones ante el gobierno nacional”.

En esa reunión se presentó ante los integrantes del organismo la planificación del proyecto “Oasis Concordia”.

Reunión con Cresto

Días atrás, previos a la última reunión del Consejo de la Producción que se celebró la semana pasada, Pannunzio y otros representantes del sector arandanero fueron recibidos en su despacho por el presidente municipal Enrique Cresto. “Gracias a una muy buena gestión del encargado del área, Marcos Follonier, logramos estar sentados por más de dos horas con Cresto, quien escuchó y aportó su visión sobre aspectos de nuestro trabajo, como lo es la cuestión laboral y los trabajadores golondrinas”, explicó.
“Nos llevamos una muy buena impresión y queremos continuar con este estilo de trabajo”, finalizó.

Aeropuerto de Cargas

En esa reunión, el intendente también había anticipado a los productores los avances en la obra para transformar el aeropuerto de Concordia en aeropuerto de Cargas. Ante la noticia de que el gobernador Gustavo Bordet consiguió los fondos para la obra a través del BID, Pannunzio dijo que “estamos satisfechos y agradecidos porque para la exportación es un gran paso”.

El flete aéreo cobra especial importancia para la segunda de las tres etapa de la cosecha. En una primera instancia, la producción de fruta primicia, que es la que sale muy temprano es trasladada por barco mientras se termina la fruta del hemisferio norte.

En la segunda etapa con buenos precios es donde se ganaría competitividad con los vuelos, porque la fruta llegaría en tiempo y forma, en estado óptimo para mostrar la calidad del arándano concordiense a los mercados más exigentes, como los Estados Unidos, que consumen masivamente la fruta hacia fin de año. La fruta de la tercera etapa viajará nuevamente por barco, para que su costo este dentro de los bajos precios de mercado, facilitando la comercialización que de otro modo no podría realizarse.-